FILATELIAINCIDENTAL.NET
No me confundas:
Madrid- Alburquerque - México - Madrid - Albuquerque
 © Jaume Balsells

 
 

Para narrar esta historia debo remontarme varios cientos de años en el tiempo, a la época en que el hombre Europeo se dedicó a descubrir su mundo, cruzó los océanos, llegó a un nuevo continente y empezó a colonizarlo.

Los exploradores Españoles recorrieron toda América del Sur y Central. Pero también viajaron hacia el Norte por la costa del Pacífico explorando California y a través de los desiertos del Oeste en lo que actualmente son los estados de Texas, Nuevo México, Arizona, y Nevada.

Otros siguieron a los exploradores y se establecieron en pueblos a los que en algunos casos, tal vez por nostalgia, llamaron con el mismo nombre que otros enclaves de la península Ibérica. Hoy en día, no es extraño encontrar una Córdoba, una Guadalajara, varias Barcelonas, varios Madrides, al menos doce Toledos y una multitud de otras menos conocidas.

Esta geografia "repetida" es la que trazó, hace cientos de años, el camino de esta modesta tarjeta postal de 1941.

La tarjeta es la respuesta de un librero español y madrileño a la Universidad de Nuevo Mexico en los Estados Unidos. Paga la tarifa de 20 céntimos para tarjeta postal a paises de la UPAE, un sello Edifil número 922. La tarjeta lleva matasellos de Madrid de 9 de Abril de 1941 y fue censurada tal como demuestra la marca de "Censura Gubernativa" de Madrid.

 

Primera confusion, Alburquerque, Badajoz:

La primera sorpresa la tenemos en el reverso de la tarjeta. Tal como demuestra el matasellos, en lugar de iniciar viaje a través del Atlántico, la tarjeta fue enviada a la ciudad de Alburquerque, en la provincia de Badajoz.

Conscientes del error, los funcionarios de Correos de esta población escribieron en el frontal lo que ellos creyeron era el destino del envío: en tinta azul, (MEXICO). Aplicaron el matasellos el 12 de Abril de 1941 y la reexpidieron a destino.
 


Segunda confusión, México D.F., México.

Tal vez sean los lazos idiomáticos los que pesaron más que las siglas USA impresas en el frontal. Pero lo cierto es que en su segunda etapa, a través de un Océano Atlántico plagado en aquellos tiempos de submarinos alemanes, la tarjeta acabó en la ciudad de México, Distrito Federal.

Menuda sorpresa se debieron llevar los funcionarios de correos de la capital de México al ver esta tarjeta. Tal vez ellos fueron los primeros en darse cuenta de que el destinatario se encontraba más al norte y, para evitar cualquier otra confusión, tacharon en rojo la palabra México y añadieron en la misma tinta las siglas E.U.A., por Estados Unidos de América.

En el reverso es parcialmente legible dos veces el matasellos mecánico de México D.F., a 22 de Mayo de 1941.

Tercera confusión, Madrid, Nuevo México, USA.

Por fin estamos en el buen camino y es dificil de entender que los funcionarios Americanos se dejasen llevar por los datos del remitente y no por la población real de destino, mecanografiada en tinta azul en el frontal. Pero lo que esta claro es que la tarjeta no fue a parar a Albuquerque sino a Madrid, en el mismo estado de Nuevo Mexico. Lo demuestran el matasellos de Madrid, New Mexico de 26 de Mayo de 1941, y tambien la marca postal "Missent to Madrid, N.M." en tinta violeta en el frontal.

                                      

Sospecho que fue en esta parada en la que la carta recibió otra de sus marcas. Una "N." manuscrita en tinta negra delante la palabra "México", probablemente aplicada para evitar otra confusión y que la tarjeta fuese de nuevo enviada hacia el pais vecino.

 

Al fin Albuquerque, Nuevo México, USA.

Todo llega a su fin y la aventura de esta tarjeta postal, que tantos quebraderos de cabeza causó a las administraciones postales de 3 paises, acabó el 27 de Mayo de 1941. En el reverso podemos ver la marca que lo constata, "Received, May 27, 1941, Office of the Comptroller".

Y es que a veces, las verdaderas maravillas postales, no hace falta fabricarlas.

     
 
 

© Jaume Balsells
Highland Park, 13 de Octubre de 2002.