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MODO DE PRESENTACION
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Desde
que conocí el mundo de la informática (y eso fue hace ya
muchos años) siempre pensé que podría significar
una ayuda sustancial en campos como los del coleccionismo, y más
especificamente el de la Filatelia. Tratamientos de textos, bases documentales,
y otras aplicaciones similares, podían convertirse en un aliado
impagable del coleccionista privado. Más tarde, la incorporación
del tratamiento de imágenes y el acceso al mismo desde el punto
de vista amateur, añadía un aliciente mayor a ese maridaje
entre informatica y filatelia. Pero la verdadera revolución ha
ocurrido con el desarrollo de Internet, que, en pocos años, nos
está cambiando a todos. Gracias a la Red, quien se dedica a la
filatelia, profesional o particularmente, ha encontrado un horizonte nuevo
que fundamentalmente a venido a dar un tremendo espaldarazo a una afición
que se creía al borde de la extinción, y a la que muchos
hemos vuelto a despertar con ánimos absolutamente renovados. Esta
estimulación global que ha originado Intenet en el aficionado filatélico
se traduce en diferentes aspectos que a continuación paso a enumerar:
- Aumento de la capacidad de interrelación con otros aficionados, no sólo cercanos, sino de todas partes del mundo. Curiosamente, uno de los inventos que seguramente dará al traste con la antigua concepción del correo, base fundamental de la filatelia tradicional, el correo electrónico, es una de las herraminetas más potentes en cuanto a las nuevas interrelaciones entre filatélicos de todo el mundo. Es habitual que, antes de enviarse una carta tradicional, dos filatélicos con ánimo de intercambiar material, venderlo, o, simplemente enviar documenteación, se crucen varios mensajes previos por correo electrónico, cosa antes impensable por estar limitados a utiizar el correo convencional o el teléfono. - Acceso abrumador a documentación que antes sólo brindaban expertos en cerrados círculos filatélicos, o libros de elevado coste y dificil adquisición. Las páginas dedicadas a filatelia en la red se multiplican día a día, y alguna de ellas, muchas, constituyen auténticos tratados académicos. -
La facilidad para optar a un nuevo tipo de coleccionismo
que antes no podía concebirse. LLamémosle, "Coleccionismo
Virtual". Con las excelentes técnicas de tratamiento
de imágenes actuales y su posterior facilidad de transmisión
y copia, en el disco duro de mi ordenador, y por consiguiente en mi página
web, puedo tener escaneados ejemplares absolutamente prohibitivos hasta
entonces. No los poseo, pero puedo estudiar sobre ellos, compararlos,
unirlos, aunque sea virtualmente, insisto, a los de mi colección,
y, como no, darlos a conocer al resto del mundo. Creedme,y aunque esto
suene a sacrilegio, tengo fotos en mi ordenador ahora mismo que me producen
más orgullo que sellos reales y tangibles escondidos en el último
cajón de mi armario. Y es que un paseo por la Red, resulta a veces
mucho más gratificante, que un frustrante paseo dominical por el
mercadillo filatélico de nuestra ciudad. -Respecto
a la compra-venta de los sellos, Internet también opera
un cambio revolucionario, hasta el punto en que me atrevería a
decir que, precisamente en el mundo del sello, Internet no sólo
supondrá en un futuro a medio plazo la extinción del comercio
filatélico convencional (insostenible en estos tiempos), sino,
muy al contrario, su verdadera salida de emergencia y solución.
¿Existe acaso ahora mismo un negocio más gravoso y menos
rentable que una tienda filatélica en el centro de una ciudad?
¿Existe un negocio más adaptable a Internet que el de la
compra-venta de sellos? Tiempo al tiempo. Y, como consecuencia de esta
reconversión comercial, algo muy importante: probablemente, y gracias
a Internet, asistamos en breve a una revalorización (al menos en
cuanto a prestigio y a su demanda-oferta) del sello usado. - Foros de debate, opinión, consulta y participación. Un lujo democrático al alcance de nuestra conexión telefónica. Sin salir de casa, y mediante la participación asidua en estos foros, chats, listas de correo, etc.. podemos establecer contacto con una nutrida legión de aficionados que atenderán nuestras consultas, pondrán a prueba nuestra capacidad de memoria, compartirán nuestras preocupaciones o debatirán, sin más, posturas enfrentadas a las nuestras, con el mismo calor, pasión e inmediatez de cualquier salón de reuniones de cualquier asociación. Este aspecto entronca directamente con el siguiente, referente al asociacionismo. - Evolución del concepto entendido hasta ahora del Asociacionismo. Gracias a todas estas características anteriormente expuestas, pero además gracias también a la posibilidad que las distintas asociaciones tienen de darse a conocer a través de la Red, se prevé un nuevo impulso renovador entre las viejas concepciones de las Asociaciones filatélicas. La 'captación' de nuevos socios puede transcender claramente las fronteras no solo locales sino internacionales. El contacto permanente con sus miembros y simpatizantes se facilita con el desarrollo y mantenimiento de una página web (a modo de boletín) abierta, participativa, ilustrativa y llamativa. Y ese contacto inmediato se verifica con y entre cada uno de los miembros o socios que permanezcan conectados a Internet, a través del correo electrónico, de foros, de chats, de listas de correo... -Vigilancia y denuncia de instituciones oficiales o de malas prácticas administrativas y comerciales. Internet es, ante todo, algo público, por lo que todo lo que se encuentra dentro de su red está 'publicado'. Quiere esto decir que el monopolio de los medios de comunicación queda roto, y cualquiera puede denunciar, advertir, notificar, informar o publicitar al margen de tener que pasar por la decisión de un consejo de redacción que filtra o censura el materiall que le llega de sus lectores / oyentes. Si el aficionado de a pie no tenía abierto hasta ahora ese vehículo de denuncia, Internet le ofrece ahora la posibilidad de, ante todo vigilar más encima determinadas prácticas administrativas o comerciales sospechosas, y posteriormente denunciarlas de inmediato, buscando además el apoyo, la ratificación y coparticipación de otros tantos aficionados de similar opinión. 'La unión hace la fuerza', pero Internet la canaliza. En fin, esto, más que una introducción se ha convertido en una glosa a Internet. Bien. Por eso estamos aquí. Unos leyendo y otros publicando. No se trata de convencer a nadie, sólo de reafirmar una realidad. Pero muy especialmente me gustaría recalcar en el aspecto participativo con cuya vocación nace esta página Web. Quisiera que estuviera efectivamente abierta a todo el mundo. Yo mismo trataré de 'forzar' alguna que otra cerradura, pero desde este momento invito a todos los que hayaís llegado hasta aquí a aportar todo lo que creaís conveniente aportar. Cada uno de los artículos que se encuentren en la página, propios o ajenos, quedarán siempre abiertos a quien quiera o pueda incorporar nuevos datos, opiniones o matizaciones. Comentarios, dudas, denuncias, o simplemente, sugerencias o ideas quedarán poco a poco incorporadas a la estructura y cuerpo del sitio. Por último, deseo dedicarle esta página a mi padre, que me lo enseñó todo, y al que no tuve tiempo de enseñarle nada de todo esto. |
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© Juan
Carlos Prieto - Abril 2002
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